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Wellbeing corporativo: todo lo que debes saber

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Empleados divirtiendose en el trabajo, riendo

El bienestar corporativo o wellbeing corporativo se ha convertido en un término de referencia para cualquier compañía que pretenda seguir creciendo y ocupando un espacio relevante en el mercado empresarial y económico.

¿Qué es el wellbeing?

Hay muchas formas de definir el wellbeing corporativo. En resumen, se refiere a un estado placentero, de bienestar y satisfacción que tienen el conjunto de los trabajadores de una compañía en relación con esta misma empresa.

Esta satisfacción abarca numerosos ámbitos como: las relaciones con los compañeros, con los jefes o directores de equipos, la percepción de salarios justos y coherentes, las infraestructuras adecuadas y necesarias para el desempeño de la actividad profesional, seguridad, sistemas de comunicación óptimos, transparencia, objetivos claros y más. En particular destaca la sensación de ser valorado dentro de la propia empresa.

Si bien, en algunos puntos la relación con la propia empresa puede no ser idílica, si la mayoría se cumplen, el trabajador entra en un estado de wellbeing corporativo o empresarial donde muy probablemente se sentirá parte de un equipo y querrá ocupar y responsabilizarse de sus competencias.

De este modo se aumenta la productividad y la calidad del trabajo, y se reducen las bajas, las rotaciones y los problemas comunicativos.

Wellbeing Vs. Wellness

El concepto de wellness en la empresa llevaba años protagonizando algunas estrategias e implementaciones corporativas. Sin embargo, desde la pandemida de Covid - 19 esta ética de trabajo o filosofía de vida resultó no ser suficiente.

El wellness empresarial hace referencia a la salud física de los empleados. En cambio, el wellbeing hace referencia a un bienestar emocional y a una satisfacción personal en el entorno laboral.

¿Qué relación hay entre el wellbeing y el crecimiento empresarial?

¿Hay pruebas de que el bienestar en la empresa, es decir, el bienestar del conjunto de los trabajadores tenga repercusiones positivas sobre la empresa como firma o marca?

Lo cierto es que algunas técnicas de bienestar empresarial además de mejorar la calidad de vida de los trabajadores, mejora la reputación, la productividad y la fuerza de la compañía.


Y, además, estas técnicas no están reñidas con un nivel de trabajo inferior o con una ausencia de responsabilidades; todo lo contrario. Parece que la clave está en encontrar empleados verdaderamente volcados con su profesión y que sientan unión con sus compañeros y con su empresa.

De hecho, tras la pandemia, cuando el crecimiento empresarial y el bienestar de los trabajadores se pusieron en el punto de mira, han surgido numerosas investigaciones que demuestran que el wellbeing corporativo es la base más sólida y la escalera de una gran compañía.

Por ejemplo, un informe de AON, empresa de consultoría y gestión de riesgos, indica que aquellas firmas que se preocupan por el bienestar de sus trabajadores implementando medidas de análisis y técnicas para mejorar su bienestar tienen menor rotación de personal, una productividad incrementada en un 42% y una mejora de la reputación de marca valorada en un crecimiento del 53% de media.

Esto refleja la importancia del wellbeing corporativo en el crecimiento de una empresa.

Por ello, cada vez existen más guías o programas de bienestar, generales o personalizados, para que las compañías mejoren la calidad y la vida profesional de sus trabajadores. El objetivo es que todas las firmas tomen conciencia de que su mayor valor es su capital humano.

¿Qué supone para el trabajador?

El trabajador de una empresa que se preocupa y fomenta el wellbeing empresarial ganará salud mental y física.

Todo ello gracias a una mayor flexibilidad laboral, por ejemplo, en los horarios, turnos y comidas. También en la forma de trabajar o en opciones como el teletrabajo o las medias jornadas.

Además, se incentivarán para ellos políticas de diversidad, de mejoras de la comunicación o espacios que fomenten el trabajo en equipo, como más salas de reuniones o incluso espacios para el descanso y la mejora de la concentración: salas de mindfulness, yoga, terrazas… o simplemente espacios privados para poder tomar un descanso.

Por supuesto, muchas empresas incluyen bonos de comida, de cultura y sobre todo de salud, el bien más preciado. En los últimos años han destacado beneficios para empleados que garantizan la fisioterapia y la psicología de los trabajadores.

¿Y para la empresa?

Para la empresa todas estas políticas se traducen en un incremento de la productividad y de las ganancias. El ambiente laboral relajado, de equipo y optimista crea también la figura del empleado prosumidor (persona que produce y consume) o de embajador de la marca. Por lo que es normal que los propios empleados atraigan clientes o incluso nuevos empleados a la oficina al sentirse satisfechos con su empresa. Así es como las empresas que más cuidan a los empleados captan nuevo talento.

En definitiva, se mejora la imagen de reputación de marca y la empresa se vuelve más competitiva superando a otros competidores del mismo sector.

Sin embargo, a pesar de las enormes mejoras que supondría para cada compañía, según el informe de Global Benefits Attitude Survey, solo tres de cada diez trabajadores ven cubiertas sus necesidades de salud y conciliación familiar.

Empleados con tableta

Y entre quienes forman parte de las empresas que han decidido hacer algo al respecto, solo el 27% cree que estas medidas han repercutido favorablemente en su vida. El resto creen que no ha tenido ninguna consecuencia positiva. Esto es una buena prueba, de que la fórmula no es adaptar técnicas genéricas que han sido útiles en cualquier compañía.

¿Qué dice la OMS?

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) la búsqueda del wellbeing corporativo “proporciona a todos los miembros de la fuerza de trabajo, condiciones físicas, psicológicas, sociales y organizacionales que protegen y promueven la salud y la seguridad”.

Para ello pone el foco en la ética, los principios conjuntos, la comunicación y la transparencia. Es decir, el wellbeing es la base de unos empleados saludables y de una empresa saludable.

¿Es necesaria una estrategia global de wellbeing?

Cualquier empresa se puede ver beneficiada por la implementación de técnicas y estrategias de wellbeing. El trabajador mejora su salud y bienestar personal y tolera o gestiona mejor el estrés y la conciliación familiar. En consecuencia, la organización independientemente de sus características particulares obtiene un mayor retorno de la inversión. Es decir, a pesar de los gastos en, por ejemplo, la mejora de infraestructuras o en recursos humanos, los ingresos a partir de estas acciones serán mayores y se convertirán en beneficios.

Para implementar estas técnicas y obtener los resultados esperados no basta con copiarlas de otras empresas.

Debe existir una estrategia global y adaptada a cada compañía que garantice los análisis correctos, por ejemplo, a través de encuestas o preguntas a los empleados. Y también las técnicas adecuadas basadas en esos análisis previos, así como una fijación de presupuestos para estas acciones y finalmente análisis que ayuden a concluir la evolución o encuentres nuevos problemas a solventar.

Cómo empezar a gestionar el wellbeing

Cada compañía deberá analizar su propia situación y la de los empleados, por ello no hay una serie de técnicas infalibles. Sin embargo, una forma de comenzar es comprender las cuatro esferas que conforman el wellbeing y que son precisamente las que lo diferencian del wellness anterior.

  • Lo social: mantener lo individual, la responsabilidad personal en las tareas, la especialización mientras a la vez se fomenta el espíritu de equipo.
  • Lo espiritual: es el por qué de nuestras acciones, el motivo, aquello por lo que trabajamos día a día y que nos hace levantarnos. Lo ideal es que esté completamente conectado con la visión y filosofía de la empresa.
  • Lo ambiental: está demostrado que los entornos agradables, estimulantes, limpios, de cooperación, libres de estrés… mejoran el bienestar, el rendimiento y la productividad.
  • Lo emocional:  el equilibrio entre la vida profesional y personal es crucial. Los turnos flexibles, conciliación familiar, tipos de jornadas…

1 de abril: día de la Diversión en el trabajo

Una forma de empezar a gestionar el wellbeing es precisamente valorar y dar la importancia que merece a ese bienestar laboral que va más allá de la salud física o mental. Es decir, que está relacionada con la realización profesional y también con la propia felicidad en el trabajo.

El día 1 de abril es el Día internacional de la diversión en el Trabajo Este día busca demostrar que cuanto más sentido del humor, buen ambiente y buenas relaciones entre los compañeros existe en la empresa, mejores son los resultados de la misma.

Es decir, que lejos de lo que solemos pensar: las bromas, los descansos o las conversaciones que duran más de uno o dos minutos sobre temas irrelevantes aumentan la productividad, pues ayudan a que el empleado se relaje, reduzca su cortisol (la hormona del estrés), su ansiedad y pueda emprender con más facilidad y mejor cognición su actividad.

Conclusión

El wellbeing corporativo es una mejora del wellness que se basa en cuatro esferas: social, espiritual, ambiental y emocional. Para cada empresa la estrategia para mejorar el bienestar de sus empleados deberá ser diferente, pero en todos los casos se disparará la productividad y la reputación.